Por Cecilia Arrroyo, periodista de PULSO Octubre 13, 2016

Complicada sigue estando la isapre de médicos Masvida. Mientras se mantiene en estricta reserva nuevos detalles respecto a su búsqueda de un socio estratégico, siguen surgiendo más antecedentes acerca de una situación financiera cada vez más estrecha y la forma en cómo lo están enfrentado.

Una de estas fórmulas ha sido la sucesiva solicitud de rebajas a las exigencias de garantía ante la Superintendencia de Salud, petición que hizo primero en septiembre y luego a inicios de octubre. Ello, con el fin de obtener liquidez para cumplir con algunos de sus pasivos.

Con este mecanismo, la isapre habría rebajado en unos $25 mil millones las exigencias de garantía, pasando éstas a unos $75 mil millones, en circunstancias que a junio se situaban en $89 mil millones y ahora debieran estar en torno de los $100 mil millones, dado sus actuales niveles de deuda con prestadores y beneficiarios.

Isapre Masvida solicita sucesivas rebajas a exigencias de garantía para pagar deudas

La liquidez obtenida ha alivianado su carga en pagos, pero también -y más importante aún- le ha permitido mantenerse dentro de los estándares exigidos por la Superintendencia de Salud. De hecho, el último informe de Estándares Legales del regulador, a junio de este año, indicaba que Masvida presenta uno de los niveles de garantía más bajos del sistema, con 100,4%, cifra 3,4 puntos inferior a la de junio de 2015 y muy cercana al mínimo requerido.

La Superintendencia precisaba en el texto que la caída “se explica por un incremento en mayor proporción de las deudas con beneficiarios y prestadores respecto del experimentado por la garantía, de 25,3%, frente a 21,2%”. La isapre debe cumplir primero con el pago a prestadores no relacionados al holding, lo que estaría siendo monitoreado por el regulador vía pago electrónico. Sin embargo, esta situación no puede mantenerse. Si el  pasivo sigue aumentando, la isapre, inevitablemente, debe elevar su garantía, lo que deriva en una suerte de “bicicleta” que debe terminar y que el regulador estaría revisando.

Si bien hasta ahora no es aplicable intervenir la aseguradora por parte de la  Superintendencia, dado que cumple con los estándares requeridos, lo cierto es que Masvida ha visitado la Superintendencia para dar cuenta de su situación. Según información de transparencia, el pasado 20 de septiembre, el superintendente Sebastián Pavlovic recibió al gerente de operaciones de Empresas Masvida, Ulises Figueroa, y a otro representante de la isapre, Victoriano Cerda, para “informar al superintendente de Salud sobre la planificación realizada por Masvida para regularizar la totalidad de los pagos a prestadores de salud”.

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