“Rodrigo (Peñailillo) es una de las personas a la que le tengo tremendo cariño y respeto. No he tenido la ocasión de encontrarme nuevamente con él, pero espero encontrármelo en algún momento y retomar esa relación de afecto, de confianza y de amistad”. “Michelle Bachelet: Recargada” se titulaba la entrevista que revista Paula le realizó a la mandataria y que fue publicada la semana pasada.

La frase no pasó inadvertida en el mundo político. Se trata del primer gesto público de Bachelet con quien fue considerado su “hijo político”, tras casi un año de silencio y una traumática salida del entonces ministro del Interior del gobierno. En el entorno de la presidenta señalan que considera necesario reconstruir los lazos con su ex hombre de mayor confianza, sobre todo tras la polémica de noviembre pasado, donde su hijo, Sebastián Dávalos, disparó con todo contra Peñailillo en una declaración en el caso Caval.

Lo cierto es que el mensaje tuvo efecto, dicen cercanos al ex ministro, quien activó todas sus redes y mandó mensajes a La Moneda a través de sus socios de la G-90, su grupo de influencia en el PPD y el gobierno. Peñailillo está disponible para retomar lazos e incluso volver a la política, se escuchó. Eso sí, debe sortear antes su vinculación al caso SQM.