El ministro Alberto Arenas destacó la semana pasada en distintos medios el informe que el directorio ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) presentó sobre la economía chilena. En una columna titulada “Bajo el prisma del FMI”, publicada el domingo en La Tercera, el titular de Hacienda calificó el documento como un “reporte riguroso”, agregando eso sí que ponía notas de cautela. “(El informe) da un importante respaldo a las reformas estructurales impulsadas por el gobierno de la presidenta Bachelet”, señaló en su columna.

En el sitio web de Hacienda, Arenas destacó que los directores del FMI “se manifestaron a favor de los objetivos de la reforma  tributaria, de incrementar la progresividad y de generar un ingreso permanente para financiar el gasto social adicional, manteniendo los incentivos para la inversión privada”.

Sin embargo, desde el sector privado  economistas advirtieron otros puntos del informe, que Arenas omitió en sus comentarios. “El crecimiento se ha desacelerado marcadamente y el peso se ha depreciado, contribuyendo a la inflación”, dice el texto en su segundo párrafo. Líneas más abajo, el FMI agrega que la agenda de las autoridades tiene un foco correcto, pero precisa que “muchos detalles todavía están en proceso”. Sobre el crecimiento, si bien el FMI sostiene que el escenario base prevé que éste tendrá un punto de inflexión en 2014, plantea que “existen claros riesgos de que la recuperación sea de poca potencia y con baches”, lo anterior en parte por “el debilitamiento del consumo privado, la incertidumbre política en el corto plazo y los shocks internacionales”.