Por quepasa_admin Abril 16, 2010

La muerte en La Habana del chileno Roberto Baudrand, gerente general de Río Zaza -empresa de Max Marambio en Cuba-, fue el tema obligado de esta semana en Chile. No sólo por lo repentino de su deceso -su cuerpo fue encontrado sin vida el martes, en su propio departamento- sino también porque en las semanas anteriores habría sido interrogado en maratónicas sesiones por la Fiscalía Nacional de Cuba, como parte de una investigación a la firma donde trabajaba el ejecutivo.

Pero mientras los medios chilenos no hablaban de otra cosa, en la capital cubana muy pocos sabían del caso. Al menos el miércoles 14, que fue el día en que la noticia explotó en Santiago con una nota publicada en La Tercera, los pocos cubanos que estaban al tanto se habían enterado por internet -que sigue siendo un lujo en la isla- o lo habían escuchado en señales de TV de Miami que reciben de forma ilegal, colgados a antenas parabólicas. De hecho, en el noticiero oficial de la televisión cubana de ese día, a las 8 p.m., no se dijo ni una sola palabra sobre el asunto. "Y lo que allí no aparece es como si nunca hubiese ocurrido. No me sorprende", dice el periodista Reinaldo Escobar, quien vive en La Habana junto a su mujer, la bloguera Yoani Sánchez. Escobar es de esos pocos cubanos que se han informado del hecho por cuenta propia.

-En el caso de Baudrand se ha implicado a la Fiscalía Nacional, que lo habría interrogado largamente en tres ocasiones. ¿Qué es exactamente y cómo opera esa institución?

-La Fiscalía es un órgano policial adscrito al Ministerio de Justicia, que se ocupa de iniciar las investigaciones que ya tienen un expediente policial. Una vez que la policía -el Departamento Técnico de Investigaciones o la seguridad del Estado- conforma un expediente, lo elevan a la Fiscalía y ésta se pronuncia sobre si hay o no delito.

-¿Quiénes la forman?

-Personas que han estudiado Derecho y tienen bastante experiencia. El jefe máximo fue destituido hace menos de un mes, sin que se diera una explicación clara de eso. Sólo se dijo que era por razones de salud. Era un general que había tenido mucha notoriedad cuando fue fiscal de la causa que juzgó al general Arnaldo Ochoa por el caso de narcotráfico en el año 90.

-Entonces la Fiscalía funciona con abogados, pero es dirigida por un militar…

-Así es, y ahora es también un militar quien está a cargo.

-¿Él sería el responsable de los "interrogatorios tipo secuestro" que sufrió el ejecutivo chileno?

-No, esos interrogatorios corren a cargo de las autoridades policiales. Primero actúa la policía; después la Fiscalía.

-¿Son frecuentes en Cuba estos largos interrogatorios, donde las personas son mantenidas por horas en casas que no conocen?

-Sí. Es una regla que allí no se aplique ningún método de tortura, al menos en su concepción más clásica: golpes, apremios físicos, la picana eléctrica. Pero lo cierto es que tortura es una palabra muy elástica. Una persona sentada incómoda y a quien no le permiten llamar a su familia, también podría decir que eso es tortura…

-En los interrogatorios a Baudraund se dice que hubo amedrentamiento…

-Claro, y se hace con técnicas de interrogatorios como las que uno ve en las películas… Y se hacen normalmente en casas. Son casas que ellos tienen para eso. Incluso son muy confortables, con muebles, te ofrecen refrigerios…

-A Bandraund lo habrían llevado a una casa en el barrio El Laguito, que tenía piscina…

-Ése es un barrio especial y exclusivo, donde se hospedan presidentes y diplomáticos importantes que vienen a Cuba. Esas casas para interrogar normalmente están en la periferia, en barrios alejados, que en su época fueron los barrios de la gente rica. Son condominios protegidos.

-¿Son de la policía, de la Fiscalía…?

-(Risas) Aquí siempre es el mismo dueño. Es el Estado. Si quieres decirlo así, ponlo: son casas de Fidel Castro.

-¿Pero esos interrogatorios con secuestro son legales?

-La ley de procedimiento penal deja bien clara las características por las que se puede arrestar a una persona y cómo son las formalidades que hay que llevar a cabo. Lo que pasa es que una cosa es lo que dice la ley y otra muy distinta es cómo se aplica en la realidad… Esos interrogatorios no son algo que nos sorprenda, porque ocurren con demasiada frecuencia.

-¿Y no se puede dejar constancia de estos apremios en un cuartel policial por ejemplo?

-Sí, normalmente la gente lo hace. Pero después eso llega a ninguna parte, no pasa nada.

-Roberto Baudrand estaba con "arraigo", sin posibilidad de salir del país… ¿Cómo es esa figura en Cuba?, ¿cómo son notificados?

-Todas las personas que viven en Cuba, incluyendo a los extranjeros residentes, deben pedir permiso para salir del país. Así está estipulado. En el caso del señor que usted dice, puede que haya pedido ese permiso y se lo negaron…

-Además de los interrogatorios, dicen que en Cuba es usual la vigilancia permanente. ¿Es cierto?

-Es una cosa muy difícil de determinar… Yo pienso que cuando una persona está en esa situación posiblemente se ha llevado una investigación previa que esa persona no sabía…

-¿Pero opera o no la vigilancia?

-Sí, desde el momento que ya hay sospechas… Eso ya es suficiente.

-A raíz de todo esto, queda la imagen de que la Fiscalía -o previamente la policía- funciona en forma autónoma, sin dar cuenta de nada. ¿Tiene tanta libertad para tomar acciones?

-No tengo experiencia concreta en esos casos… Pero lo cierto es que tiene bastante libertad para actuar…

-Frente a esos casos, ¿cómo opera el sistema judicial cubano?, ¿existe o no una contraparte al actuar de esta Fiscalía con tanta libertad de acción?

-Que yo tenga noticias, no existe esa contraparte…

-Se habla de dos cubanos -la contadora y el gerente comercial de Río Zaza- detenidos en algún paradero desconocido… Que se comunican con sus familiares y que dicen que "están bien"… ¿cómo explicarse eso?

-Eso dicen los rumores… son comentarios que no han sido confirmados por nadie. No hay información oficial sobre eso.  Todo este caso no es vox populi en Cuba, porque hasta ahora no hay información oficial.

-Pero poniéndose en el caso de que todo ello fuera verdad, ¿los sorprende?

-No nos sorprende para nada, aquí es algo normal.

Relacionados