La Subsecretaría de Marina le habría negado la construcción de un puerto granelero a la familia Urenda en Laguna Verde, debido a que la forma en que fue presentada la solicitud no se ajusta al reglamento de concesiones marítimas. Sin embargo, tras la negativa también habría otro motivo: un posible daño ecológico. El proyecto, dirigido por José Manuel Urenda, hijo de Beltrán Urenda, cuenta con una inversión de unos US$ 100 millones y consiste en un rompeolas de 500 metros y un sitio de atraque de 15 metros de profundidad. Al cierre de esta edición, la portuaria Mar Austral -controlada por los Urenda- aun no era notificada. Aunque el dirigente vecinal Antonio Robles afirma que la comunidad da por hecho que el puerto no se construirá.