Era cosa de tiempo, pero no de lugar: era obvio que iba a ocurrir en Japón. Este mes debutó en Nagasaki el primer hotel con trabajadores robots. El Henn-Na Hotel es un albergue high-tech que emplea a diez robots en su mantenimiento. Tres de ellos son ginoides, es decir, androides con aspecto femenino. O fembots. El resto del equipo se encarga del aseo, servicio a la habitación, lavandería y otros menesteres.

El lugar además usa reconocimiento facial y tabletas para las necesidades del pasajero. Es absolutamente sustentable: funciona con energía solar y otros métodos de conservación energética. Tiene 72 habitaciones, también hay humanos atendiendo y los precios van desde los 60 dólares la noche.

Una ganga. Aunque para lograr una reserva se necesite una suerte más bien humana. O sobrehumana.

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