Desde que la computación tradicional ha podido emular plataformas de videojuegos, el recurso se transformó en un favorito de jugadores nostálgicos. Dentro de ese maravilloso cofre del tesoro -de toda índole- que es Internet Archive, un tal Jason Scott desarrolló versiones de juegos clásicos, desde 1970 a 1990, para usarlos directamente desde un navegador, sin necesidad de bajar o instalar programa alguno. Sólo dos clicks y listo. Hay ¡900!, desde ultraclásicos, como el Defender y el Elevator Action, a joyitas como el Golden Axe y el Out Run. Ideal para perder una tarde completa.