Por Susana Mateu* Octubre 31, 2009

Aunque mute en abuelete entrañable a lo largo de media docena de sus nuevas viñetas, el pequeño galo Astérix no sólo resiste a los romanos, también le planta cara al paso del tiempo. Son 50 años los que cumplió el 29 de octubre, a celebrar con la edición de El aniversario de Astérix y Obélix. El libro de oro. El álbum reúne historias cortas para dar cabida a los distintos personajes aparecidos en la serie, y dibujos y textos inéditos de sus creadores, el desaparecido René Goscinny y Albert Uderzo.

Una tirada de tres millones de ejemplares da cuenta de su formidable salud. Sin embargo, sus seguidores no dejan de preguntarse si están ante la última entrega. La última, al menos, creada por Uderzo (82 primaveras), dibujante y también guionista desde la repentina muerte de Goscinny, en 1977, y cuyo ritmo de trabajo oscila entre dos y cuatro años para alumbrar un nuevo título.

El caso es que, en 2005, y con motivo de la edición del anterior, ¡El cielo se nos cae encima!, Uderzo se manifestaba en contra de que alguien continuara con su labor: "Astérix seguirá vivo a través de los álbumes, de las películas, de las cosas que queden, pero aunque parezca pretencioso por mi parte decir que nadie más puede hacerlo, las experiencias que se han conocido han dado muy malos resultados".

Sin embargo, Uderzo finalmente ha vendido a la editorial Hachette-Livre el derecho a buscarle un sustituto cuando deje el lápiz. La decisión, firmada junto a la descendiente de René Goscinny, lo ha enfrentado a su propia hija. Accionista en la empresa original, reclama papeles de una jugosa operación, habida cuenta de los más de 200 millones de euros que recaudan sus "hermanos" al año.

* Periodista de El Mundo de España

Relacionados