Por Juan Pablo Garnham, desde Nueva York Agosto 13, 2015

A fines del año pasado, una amiga en San Francisco tuvo la suerte de ir a un show íntimo con uno de los comediantes más solicitados del momento, Aziz Ansari. “¿Cómo estuvo?”, le pregunté con envidia. “Divertido, pero extraño”, me dijo, “nos preguntó muchas cosas de nuestras citas y relaciones. Incluso a algunos les pidió sus teléfonos y revisó sus mensajes”.

Meses después entendería lo que estaba tratando de hacer Ansari. Ese no era un show de stand up, era un estudio de campo. Todo quedó claro cuando comencé a leer Modern Romance, el libro donde el comediante intenta estudiar cómo nos enamoramos hoy, cómo establecemos relaciones románticas y, especialmente, cómo esto ha cambiado desde el tiempo de nuestros padres y abuelos.

Para la mayor parte de la gente, Ansari es conocido por su personaje en la serie Parks & Recreation, pero sus shows de stand up llenan teatros y arenas en todo Estados Unidos. Y hace un buen rato que viene haciendo algo distinto: investiga para sus monólogos, lee y, se nota, piensa. Modern Romance es la conclusión de este estilo.

Para hacer este libro, se unió al sociólogo de Berkeley Eric Klinenberg y comenzaron a leer investigaciones y a entrevistar a expertos universitarios. Hicieron una decena de focus groups en ciudades tan distintas como Dubai y Buenos Aires y, por supuesto, aprovecharon los shows de stand up —como el que fue mi amiga— para saber cómo estamos invitando hoy a salir a las mujeres y qué mensajes de texto funcionan mejor a la hora de llamar la atención del sexo opuesto.

Al comienzo del libro, por ejemplo, Ansari y Klinenberg parten a un hogar de ancianos en el Lower East Side de Nueva York y comienzan a preguntarles a los residentes sobre sus historias amorosas. ¿Cómo conocieron a sus parejas? ¿Por qué se casaron? ¿Qué esperaban del matrimonio? La mayoría de los ancianos decían que su pareja fue un vecino o vecina, un amigo de un amigo, la hija del dueño de la tienda de enfrente. Alrededor de la mitad vivían a dos cuadras de distancia, nada más distinto que lo que hoy vivimos. Y cuando explicaban qué los hizo decidirse por ellos, las respuestas eran también muy distintas a las de hoy: tenía buena profesión, se veía como una buena persona y, por supuesto, la idea de querer salir de la casa de los padres.

Ahora, en cambio, Ansari dice que vivimos en una época en que establecemos una relación de alto riesgo y alta recompensa con nuestras parejas. Las historias que contamos hoy de nuestros esposos o esposas están llenas de amor profundo, de sueños de envejecer juntos y coincidencias providenciales tipo How I met your mother. “Cuando hablamos con personas mayores que estaban en matrimonios alegres y exitosos, sus explicaciones sonaban simples, sin el estrés de las parejas de hoy”, escribe Ansari. “Ahora, miremos a nuestra generación. Estamos en un corredor con millones de puertas. Es bueno tener opciones, pero ¿millones? ¿Es mejor? Es terrorífico”.

Por supuesto, Ansari dedica largo tiempo a hablar de Tinder y las nuevas aplicaciones para smartphones, todo en este estilo cómico-autobiográfico-académico. También escribe de la posibilidad de googlear a tu interés romántico, de lo mucho que funciona tener una foto de un perro en tu perfil, de cuánto esperar a la hora de mandar un mensaje de texto o cómo terminar una relación.

Pero, para mí, lo que más queda de este libro es el hecho de que, cuando se mezclan géneros y áreas del conocimiento, cosas interesantes suceden. Como cuando Ansari relata que sus padres se casaron en un matrimonio arreglado y, finalmente, entre datos de papers y anécdotas personales, termina llegando a una de las revoluciones más importantes de las últimas décadas: la de las opciones. La que nos afecta a la hora de comprar, de elegir una carrera y, por supuesto, una pareja. Y lo que pasa aquí es que, un libro de un comediante termina dando lecciones más universales y más entendibles que muchos de los otros intentos que se han hecho para explicar el mundo en el que nos movemos hoy.

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