Por quepasa_admin Marzo 13, 2014

Fue un secreto a voces que La Moneda se jugó para que Evelyn Matthei reemplazara a Pablo Longueira como candidata de la Alianza. Y los focus group internos apoyaban la opción: Matthei apareció constantemente entre los ministros más valorados desde su incorporación.

En 2011, año crítico para el gobierno, era una de las pocas cartas que destacaba por su rol desde Trabajo, ubicándose junto a Laurence Golborne. “Se valora como alguien decidida a atacar a quienes abusan de los trabajadores, independiente del poder que tengan”, decía un estudio hecho por la empresa Cadem en diciembre de ese año. Más adelante, el texto apuntaba que “es interesante observar que la favorable imagen de fiscalización firme a favor de los trabajadores y la clase media que transmiten Evelyn Matthei y Pablo Longueira (entonces ministro de Economía) se estaría traspasando, para algunos, al gobierno en general”.

Otro focus group de la misma firma en enero de 2013, iba más allá: se le evaluaba como un “gran aporte”, “inteligente, eficiente, carismática, con experiencia política y con un carácter fuerte”, que “defiende sus ideas”  y con “una verdadera y genuina preocupación por las personas”. La frase final resultó premonitoria: “Gran parte de los entrevistados la perciben como una fuerte y buena alternativa como candidata presidencial”.

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