Diversas reacciones mostraron los consejeros de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) ante la propuesta de reestructuración del gremio industrial realizada por cinco connotados empresarios a través de una carta.

La misiva  fue enviada por Bernardo Larraín Matte, Gonzalo Said, Juan Manuel Santa Cruz, Alfonso Swett y Richard von Appen el 12 de octubre al presidente de la Sofofa, Hermann von Mühlenbrock, y a sus vicepresidentes, José Juan Lllugany y Gastón Lewin, siendo reenviada por la cúpula dirigencial a todos los consejeros el pasado martes.

La propuesta plantea que el Comité Ejecutivo esté compuesto por un presidente y dos vicepresidentes -como en la actualidad-, y que sume además a cinco presidentes de nuevos Comités Estratégicos (Evolución Empresarial; Empresa y Ciudadanía; Políticas Públicas; Internacional y Regional). Cada “presidente debe transformarse en una voz autorizada (interna y externamente) en su área y temática. De esta forma, los miembros se distribuyen los roles indicados y los asumen tanto internamente hacia la institución como externamente hacia la sociedad”, señala la misiva.

Justamente es en este aspecto donde surgen los reparos de algunos consejeros: “Se dice que cada presidente de cada comité tendría la facultad a decir lo que quiera en el tema que le corresponde, o sea, que no tiene que pasar a través del Presidente de la Sofofa. Es como una cueca. ¿ Y toda la estructura fija, como el Departamento de Estudios, el Jurídico, etcétera. de quién dependerán? ¿Se imagina como se va a administrar eso?”.

Otro consejero recuerda que “antes, la Sofofa tuvo una serie de comités y no había ninguna unidad en el mensaje, sino que salía el presidente de un comité a decir una cosa y salía el presidente de otro comité a decir otra. Así no funciona”.

Otro aspecto negativo que algunos consejeros recalcan de esta nueva estructura es que “no se puede pedir una reunión con el ministro de Hacienda, que vaya el secretario general u otro representante y no vaya el presidente de la Sofofa. Las cosas en este país no funcionan así, aunque se pretenda lo contrario”.

Mientras otro consejero señala “lo veo difícil, muy rebuscado e innecesario. Quien quiera ocupar la presidencia de la Sofofa quiere tener la responsabilidad de elegir su propio equipo de trabajo. ¿Quien va a querer tomar la presidencia de la Sofofa si se le van a imponer cinco personas con tanto poder? Además, los comités se reúnen una vez a la semana y las personas que están dentro de la estructura de la Sofofa están todo el día”.

Incluso, una visión más dura de un consejero señala “a este grupo de cinco empresarios le acomoda una Sofofa así, porque ninguno de ellos puede dedicarse full time a la Sofofa. Pareciera que e estos cinco grupos económicos están tratando como de capturar a la Sofofa. Y en una Sofofa manejada por cinco grupos económicos, pierden todos los gremios regionales, los gremios industriales”.

Voces que adhieren

Sin embargo, otros consejeros concuerdan con la necesidad de reestructurar el gremio y estiman que esta propuesta puede ser una opción. Respecto a la situación actual un consejero afirma que “falta algo de mayor presencia en los problemas nacionales con propuestas que sean transversales”. Sin embargo, estima que la solución más allá de centrarse en que haya una mayor cantidad de personas con poder o a cargo del gremio, pasa por que haya una comunicación más transversal .

“Me imagino que como todas las organizaciones, los gremios tienen que irse ajustando a la realidad y el entorno de cada momento”, asevera otro miembro del Consejo.

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Algunos consejeros reparan en que con una nueva estructura, el gremio podría terminar enviando mensajes contradictorios y perjudicaría la coordinación interna. Mientras otros consideran que falta una renovación y que ésta sería una opción viable.