Por Alejandra Costamagna Junio 3, 2015

© Romero y Campbell

Al final de La reunión, la primera obra escrita por la actriz Trinidad González, un niño hablaba con Cristóbal Colón. Decía: “Si tengo suerte podría llegar a ser un pájaro, pero cuando esté volando uno de ustedes me va a lanzar una piedra porque sí y yo voy a morir porque sí, reventado en algún camino”. A la dramaturga, ganadora de un premio Altazor por su rol en Neva, le quedó resonando la imagen del hombre con la cabeza ensangrentada, interrogado por otros: quién le tiró la piedra, por qué, en qué circunstancias. Y es lo que vemos ahora en Pájaro, obra escrita, dirigida y actuada por González, que forma parte del ciclo Teatro Hoy.

El hombre apedreado dice ser un pájaro en extinción, ajeno al pragmatismo, la competitividad y el ritmo vertiginoso que promueve la sociedad actual. Lo que podría haber derivado fácilmente en un cliché -la idea del pájaro como un ser libre, fuera del sistema-, es trabajado con sagacidad por la directora y su equipo, al confrontar las posiciones de los interlocutores del pájaro y alejarlos de las caricaturas fáciles. Se trata de tres amigos relativamente cultos, relativamente artistas, relativamente críticos con la sociedad, que se han vuelto apáticos, amargos y algo frívolos en su tedio pequeñoburgués. Una madrugada de invierno los amigos toman vino y matan las horas vacías en un diálogo que es también una muestra de egos, cuando la dueña de casa sale a botar la basura y regresa con este ser extraño. Lo que al principio divierte a los comensales, luego provoca incomodidad, porque los confronta con sus pequeñas miserias y su patetismo. Desde sus distintas ópticas y con sus particulares matices, los amigos se sentirán agredidos por este ser radicalmente descreído, que ha optado por marginarse del mundo y de los seres humanos en esta “época terrorífica”. El conflicto va escalando en su espesor de manera progresiva hasta que la diversión inicial se vuelve una pesadilla. A pesar de que el final podría acotarse y acaso ser más dinámico, el montaje es un peldaño firme en la impecable trayectoria de Trinidad González.

“Pájaro”: hasta el 14 de junio en el Teatro de la Palabra.

Relacionados