El pasto no era tan perfecto, pero no importaba. Lo que importaba, como siempre, era meter la pelota en el arco. Y verse bien. Era la época de las patillas largas y los shorts cortos; del Pelé más maduro, de Cruyff, de George Best. Eran los setenta, esos primeros años donde el fútbol gozó de una dimensión global, de los lujos, de la popularidad que cruzaba fronteras, pero aún no era algo establecido y aceptado como hoy. En el libro The beautiful game. El fútbol en los años setenta, la editorial Taschen hace lo que sabe hacer: con fotos muy bien escogidas captura la esencia de ese fútbol. En sus páginas aparece Platini en abrigo de gamuza, Best con pantalones pata de elefante y Dino Zoff bajándose del avión como un rockstar.

Por supuesto, también hay fotos de arqueros volando a atajar una pelota, de Beckenbauer y Pelé celebrando en mundiales, pero quizás lo que más queda es lo anterior: esa fama de los primeros dandis futboleros. De los que todos los demás han aprendido y a los que, por mucho peinado raro y tatuaje que se hagan, nunca podrán alcanzar. Quizás Neymar y Messi rivalicen con Pelé y Cruyff en talento y gambetas, pero en el estilo y onda que muestran estas páginas, los veteranos aún dan clases.

Próximamente en taschen.com