Por Antonio Díaz Oliva Abril 15, 2015

El apocalipsis como la broma final. El mundo se acaba -ya sea por culpa de zombis, catástrofes ambientales o guerras nucleares- y lo mejor, sin duda, es soltar una carcajada nerviosa. Eso por lo menos le sucede a Phil Miller (Will Forte) en The Last Man on Earth. Único sobreviviente de un virus letal, Miller ha recorrido todo Estados Unidos y al parecer está tan solo como Tom Hanks en el Náufrago (de hecho, también tiene amigos que son pelotas deportivas). Miller flirtea con maniquíes, se baña en una piscina de alcohol y tiene su casa decorada con cuadros que ha robado de importantes museos. Y se ríe solo, claro. Se ríe solo porque es el último ser humano hasta que se da cuenta que está equivocado. Ahí está, primero, la aparición de Carol (Kristen Schaal), con quien Forte se casa para poder repoblar el mundo, aunque en el fondo la odia un poco. Y luego la sorpresa de que hay otra mujer, y ésa es ni más ni menos que Melissa (la impecable January Jones).

The Last Man on Earth es una pequeña sorpresa. Una historia apocalíptica, pero con el humor y espíritu de Saturday Night Live y 30 Rock, las dos escuelas donde Forte se formó. Si el apocalipsis ya está acá, por lo menos que nuestro antihéroe sea lo suficientemente torpe para hacernos reír y recordarnos que, al parecer, la humanidad no merece salvarse.

“The Last Man on Earth”.

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