Por Gonzalo Maier Noviembre 14, 2009

Después del éxito de Synco, Jorge Baradit regresa con Kalfukura (Ediciones B), su última novela.

-Partamos con una pregunta difícil: ¿cómo se debiera resolver el problema entre los mapuches y el Estado chileno?

-Que una machi viaje a La Moneda y le revele a Bachelet que la virgen del San Cristóbal es el pomo de una espada clavada sobre la cabeza de Tren-Tren, la serpiente mitológica mapuche. Que si retiran esa espada clavada durante la Conquista, la serpiente, que es toda la cordillera de los Andes, despertará y cobrará el daño hecho con un cataclismo. Un grupo de 88 mapuches armados estará rodeando la virgen en esos mismos instantes, esperando una respuesta.

-Y en la lucha por la Kalfukura, la piedra mitológica sobre la que gira tu nueva novela, ¿cuál de los candidatos gana?

-Piñera buscaría comprarla y luego licitarla por el triple; a ME-O no le entenderíamos su plan de acción; Frei formaría una comisión, para después archivarla bajo un nombre equivocado; y Arrate querría expropiarla para destruirla y repartir un pedacito inútil a cada chileno.

-De a poco la sci-fi se ha metido en un mercado dominado por novelas destinadas al ABC1. ¿Cómo sería Chile si esa tendencia continúa?

-Nuestros contenidos inconscientes son tan tectónicos que si se derramaran en forma de novelas, imágenes y cine, estoy seguro de que habría menos erupciones volcánicas.

-Lo último: echando un vistazo rápido a la historia reciente de Chile, ¿qué personajes te parecen bajados de un Ovni?

- El divino Anticristo es el comandante de una nave en donde venían Manuel Contreras, Krassnoff, Adolfo Zaldívar y la Bolocco. En realidad son seres humanos del futuro, agentes que vinieron a sabotear la historia. Fernando Flores es Jabba the Hutt y se alimenta de gusanos. Ojo con Tompkins, está comprando el territorio donde se asentarán aliens encubiertos como la reina Isabel, Obama, Schwarzenegger o Elvis.

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