Por Felipe Hurtado H. Diciembre 15, 2017

Estudiar un MBA se ha transformado en una decisión cada vez más común entre los profesionales, que entienden que estos muchas veces son fundamentales en sus objetivos de seguir creciendo laboralmente y alcanzar nuevas responsabilidades dentro de una empresa. Los centros de estudio también reconocen esta importancia y ofrecen una oferta variada.

Frente a este amplio mercado, las universidades han entendido que deben acercar sus cursos lo más posible a los alumnos, creando nuevos cursos y ofreciendo facilidades a los estudiantes en cuanto a los contenidos y horarios.

La flexibilidad es un concepto común en las instituciones académicas. En la Universidad Santo Tomás lo tienen asumido dentro del proceso. Catherine Korn, directora del MBA de la sede Santiago, asegura que su plan de estudios se mueve según lo dicten los tiempos. “Eso nos permite hacer actualizaciones en relación con las nuevas tendencias en gestión de negocios. Además, para aquellos profesionales que no pertenecen al área de la administración, contamos con un buen programa de propedéutico, al inicio del magíster, que les permite familiarizarse con las temáticas más relevantes propias de nuestra disciplina”, advierte.

Los días y horarios de las clases son parte de la constante evaluación de las universidades para acercar sus cursos a los estudiantes.

No es lo único. Los días y horarios de las clases también son parte de esta constante evaluación. Por eso, para el próximo año presentarán novedades. “Hemos percibido que los potenciales alumnos valoran más un horario que se condiga con su jornada laboral. Por ello, a partir de 2018, en Santiago hemos optado por el formato weekend, que ya ha sido bien aceptado en las sedes regionales en las que se imparte nuestro programa, como Iquique, Antofagasta, Los Ángeles, Concepción, Temuco, Puerto Montt y Valdivia”, agrega Korn.

Al igual que en la Santo Tomás, en la Universidad de Santiago también han optado por el sistema weekend. Francisco Castañeda, vicedecano de Docencia e Innovación, cuenta que además de los dos MBA vespertinos Executive (uno para ingenieros comerciales y civiles industriales, y otro para profesionales con algún grado de especialización en el área de negocios), imparten un tercero, que se realiza cada dos semanas, los viernes de 16 a 22 horas y los sábados de 9 a 18.

Además, reconoce que han potenciado el área de sus cursos de inglés y coaching. Lo mismo sucede son sus docentes. “Es de vital importancia atraer profesores con experiencias concretas en el ámbito privado y público. El mejoramiento de la productividad en las empresas y en la economía como un todo requiere de profesionales que puedan innovar en sus respectivos ámbitos, y así generar una senda de cambio que permita a otros tener miradas más allá de lo meramente tradicional”, detalla.

En la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile también han oído a los estudiantes y su actualización de requerimientos. “Aunque nuestro programa es sólo uno, ofrecemos distintos formatos, adaptados a las necesidades de los directivos de hoy. Todos nuestros formatos garantizan el rigor académico además de ajustarse a la disponibilidad de cada profesional”, dice Ismael Oliva, director de la escuela de Postgrados.

Entre los seis distintos formatos que ofrecen en la Casa de Bello, destacan el Sunrise MBA, muy en sintonía con las nuevas tendencias de las principales universidades en el extranjero. “Es pionero en Chile y su gran característica diferenciadora son sus clases a primera hora de la mañana en el Centro Parque de Las Condes. El formato es habitual en las principales escuelas de negocios de Estados Unidos y Europa, y en el mediano plazo debería transformarse en una tendencia a nivel de posgrados”, subraya Oliva.

Este programa lleva a los alumnos al aula más temprano: los cursos se dictan los martes y jueves entre las 7:00 y las 10:15 a.m., además de los sábados de 9 a 12:15. En la FEN de la Universidad de Chile consideran que este formato permite compatibilizar el estudio con las actividades profesionales y personales, además de resaltar que se evita el cansancio acumulado de una jornada laboral.

Otro formato que acerca la cátedra al alumno es el Global MBA, en conjunto con Tulane University, de Luisiana, en el que los profesores de esa casa de estudios estadounidense viajan a Chile a impartir los cursos.

Para la Universidad del Desarrollo es familiar la tendencia del horario de fin de semana, que se suma al habitual en jornadas laborales. Fernando Sánchez, director académico del MBA, comenta que “un horario es todos los martes y jueves, y el otro es el weekend, es decir, clases cada tres semanas durante todo el viernes y el sábado”.

Admite que esta última opción ha tenido particular aceptación. “Es muy demandada por alumnos que trabajan o viven en regiones, porque les permite viajar para asistir a las clases en Santiago y Concepción, donde se imparten los cursos”, subraya.

Además, cuenta que han modificado la malla de su MBA, con la incorporación de electivos, que “se adaptan y dictan de acuerdo a lo que demanda cada curso”.

En la Universidad Católica también asumen la posición de evolucionar constantemente. Marcos Singer, director de los MBA, asegura que eso lo demuestra la amplia “gama de horarios, días de la semana y locaciones, desde donde los alumnos pueden elegir lo que más les acomoda”.

Sin embargo, considera que la mayor muestra de flexibilidad hacia sus alumnos es la posibilidad de concentrar sus estudios. “Pueden cursar las materias transversales y eligen una gran concentración vertical, modelo que se denomina ‘T’. Otros hacen una ‘N’: cursos transversales y dos verticales (más cortos); otros hacen una ‘M’, con tres verticales. Todo depende de sus intereses y fortalezas personales en el mercado”, asegura.

La mayor esperanza de vida y, en consecuencia, de la etapa laboral de las personas, ha llevado a la Universidad de los Andes a crear el MBA Senior. Álvaro Pezoa, director del Executive MBA de ESE Business School, resalta que se trata de “una iniciativa para responder a la necesidad de los ejecutivos y empresarios de reinventarse para enfrentar una segunda vida laboral… Las empresas tienden a prescindir de gente valiosa a más temprana edad (hoy es 50 años o menos), las personas deben prepararse para una segunda vida laboral, ya sea para trabajar en otras empresas, o para ser emprendedores, consultores o directores de empresas”.

La reinvención: un concepto que los MBA no dejan de aplicar.

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