En algún momento se habló de Osorno, también de estrenar caminos en Ovalle y hasta de Chillán, pero finalmente se decidió que el escenario de la séptima fecha del Rally Mobil se realizara en Valparaíso, específicamente en las rutas de la Viña Matetic.

Será un fin de semana de tensión para la principal competencia tuerca del país, que celebra su 18ª temporada. Faltando sólo esta carrera y el Motorshow —el evento de cierre que se realiza el 2 y 3 de diciembre, y que entrega la mitad del puntaje de una fecha habitual—, lo que ocurra este fin de semana en los caminos de la Quinta Región será clave para la definición de las coronas aún en disputa.

De existir una próxima fecha mundial del World Rally Championship en nuestro país, debería ser en 2019.

Ya están definidos dos títulos. El de la categoría R2 (autos fabricados especialmente competir con motorización de 1.600 cc aspirado o 1.000 cc turbo), que quedó en manos de Francisco “Chaleco” López; y de la R3 (2.000 cc aspirado y 1.600 turbo), que se definió antes de correrse este fin de semana, cuando el miércoles Jorge Martínez anunció que una lesión en la clavícula le impedía presentarse e intentar la casi imposible misión de revertir la desventaja de 28 puntos que le lleva Cristóbal Vidaurre, el ahora flamante monarca.

Así, queda por conocer los campeones de las otras tres series de la competencia: R3 Light, R2 Light y N3 (vehículos de producción de hasta dos litros).

El argentino Santiago Gambetta (R3L), Martín Etcheverry (R2L) y Franco Illino (N3) también tienen opciones de festejar este fin de semana, aunque dependen de una combinación de resultados algo más engorrosa.

De todas maneras, el Rally Mobil no vive concentrado exclusivamente en el presente.

El proyecto de organizar una fecha del Mundial es tan antiguo como la competencia nacional, sin embargo, no fue hasta hace un par de años que la idea comenzó a tomar forma definitiva.

En 2014, el productor de la competencia, Felipe Horta, se acercó por primera vez a las autoridades del World Rally Championship (WRC), el mismo donde se lucieron figuras de la talla de los finlandeses Ari Vatanen y Tommi Mäkinen o el francés Sébastien Loeb se convirtió en una leyenda viva.

Por esos años sentían que la presencia latinoamericana era suficiente con México y Argentina, por lo que la respuesta oficial fue un amable no.

Acá no se conformaron e insistieron. Consiguieron una reunión más formal, esta vez durante la carrera del certamen planetario en la región francesa de Córcega, donde avanzaron mucho más y les plantearon las ventajas de llegar a Chile.

Les hablaron de la larga experiencia del certamen, de la buena cantidad de autos en las categorías R y los planes para seguir desarrollándolas, de las virtudes de Carabineros y también del reconocimiento que tenía la competencia en el país.

La respuesta fue la buscada y todo se movió rápido.

Se calendarizó el proceso y quedó establecido que, de ocurrir, la fecha del Mundial debería ser en 2019. Antes de eso, había requisitos que sortear. El primero, que las autoridades del WRC visitaran el escenario elegido para la postulación: Concepción. En mayo pasado vino el alemán Oliver Ciesla y se fue satisfecho con lo que vio.

“El proyecto incluye hacer tres fechas del Mundial a partir de 2019 y un Premundial, en 2018”, dice Horta.

Esta última carrera a la que hace mención es una competencia con autos oficiales del Mundial, con pilotos experimentados y con un recorrido con las distancias reglamentarias, es decir, con más de 300 kilómetros cronometrados, cerca del triple de lo que tiene una carrera habitual del campeonato local.

Se realizaría en mayo próximo, aunque todavía no puede confirmarse. Fuentes cercanas a la negociación cuentan que el costo total del proyecto es de unos US$11,5 millones, recursos que hoy se buscan en las arcas fiscales, pues se entiende que se trata de un plan país.

Estos últimos días han sido agitados al respecto, con muchas conversaciones con autoridades buscando el sí que permita contestar definitivamente al WRC, que ha dado margen de movimiento.

Pedro Heller (28) es el único chileno que hoy compite en el Mundial. El hijo del presidente de Azul Azul, Carlos Heller, armó un proyecto para participar en el WRC 2, donde compiten autos de la serie R5, la categoría inmediatamente inferior a la estelar. Terminó 19º, con 18 puntos y muy contento. “Nuestro objetivo era ganar experiencia y lo conseguimos”, dice.

Para él, Chile está preparado para recibir una fecha mundialista. “El nivel de producción que se hace acá, el show y las ayudas que se dan para que exista retorno económico para los auspiciadores no tienen nada que envidiarle a lo que sucede allá”, enfatiza.

Respecto de los caminos y la opción de Concepción como sede, su posición es aún más firme. “Es una gran plaza. Hace poco estuvimos en Gales, considerada una de las fechas más difíciles del calendario, y Concepción es muy parecida, con hartos kilómetros de buenos caminos y dificultades para los pilotos”.

La espera de la confirmación del gran salto que pretende dar el Rally Mobil se percibe en la organización, en la previa de esta penúltima estación del año.