Lula, condenado
Es, sin ninguna duda, la gran víctima que se ha cobrado el caso Petrobras desde que hace tres años empezara a escavar en las redes de corrupción de la elite brasileña. Luiz Inacio Lula da Silva, ex presidente del país más grande de Sudamérica, fue condenado ayer a nueve años de cárcel por corrupción y lavado de dinero. Lula, que había manifestado sus deseos de ser candidato presidencial en 2018, podrá apelar para evitar un ingreso inmediato a la prisión. Aunque una confirmación del fallo de culpabilidad implicaría su inhabilitación política. La opinión pública no tenía medias tintas: unos se decidían por Lula, el corrupto. Otros, por Lula presidente. Por el momento, la Justicia dice que la primera opción sería la definitiva.
Duras acusaciones contra los Humala
La fiscalía peruana presentó una solicitud de prisión preventiva para el ex presidente peruano Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia, en el marco del caso Odebrecht –que en Chile a varios les debe sonar- por presuntas irregularidades en torno a aportes a las campañas presidenciales de 2006 y 2011. La acusación sobre la pareja dice que habrían recibido nada menos que tres millones de dólares de la constructora brasileña, involucrada en casos de corrupción en otros países de Sudamérica. Incluido el nuestro.
Acuerdo por los niños
Luego que la Cámara de Diputados rechazara el informe de la Comisión Investigadora por la muerte de niños en el Sename, desde el mundo político se levantó un duro debate sobre que gobiernos han hecho más o menos por los niños que viven en los centros. Y también hubo llamados a grandes acuerdos nacionales como el realizado por el ex presidente Sebastián Piñera, quien desde sus vacaciones en México envío el mensaje. Y desde La Moneda tampoco quisieron ser menos. La presidenta Michelle Bachelet convocó a una reunión de emergencia con todos los poderes del Estado para intentar abordar el tema de manera integral y sin aprovechamientos políticos como dijo al finalizar ese encuentro. Fue una semana en que todo el mundo político se acordó de los niños.
“Sin ánimo de matar”
"Me da miedo, porque no hay justicia para las mujeres. Los hombres pueden hacer y deshacer con las mujeres solo porque una es mujer. No hay respeto". Esa fue la primera reacción que expresó Nabila Rifo en conversación con radio Cooperativa luego de confirmarse el fallo de la Corte Suprema que rebajó la condena de 26 a 18 años de pena efectiva al único acusado de la brutal golpiza recibida por la mujer, Mauricio Ortega, al determina el máximo tribunal que no existió ánimo de matar por parte del esposo de la mujer. Con ello, se eliminó la figura de femicidio frustrado. El dictamen, que contó con el voto en contra de Milton Juica, provocó el rechazo de gran parte de la opinión pública, incluso del gobierno que suele no comentar fallos judiciales, quien a través de la ministra de la Mujer, Claudia Pascual, lamentó el fallo. El dictamen es inapelable
Guerra de buses
Esta semana llegó a las calles de Santiago y Valparaíso el llamado Bus de la libertad que busca promover que los padres tengan el derecho a educar a sus hijos de acuerdo a los valores y convicciones que tiene cada una de las familias, sin una mayor intervención del Estado. “Nicolás tiene derecho a un papá y una mamá” es el mensaje con el que recorrió el bus como rechazo a cualquier otro tipo de familia que no sea entre hombre y mujer heterosexual. El bus levantó una polvareda de críticas, comandadas por Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh) y la fundación Iguales, quienes acompañaron todo el recorrido del bus con otro bus denominado de la Diversidad. Todo ello provocó discusiones que llegaron a los golpes y detenciones por parte de Carabineros, entre ellos el autodenominado Pastor Soto.
