Por José Ignacio Stark Noviembre 27, 2013

Brenna Loury: Se habla españoL

¿Qué hace una estadounidense trabajando en PR de tecnología en Chile? Cuesta creerlo, pero Brenna Loury (27) ha hecho toda su vida profesional en Santiago, primero como encargada de Comunicaciones de Start-Up Chile, y ahora como el puente entre marcas y emprendedores extranjeros que quieren lanzar sus productos y servicios aquí. Ella es la cara desde Chile al resto del mundo de Huntcha, Doist, Songkick y el capítulo internacional de Reforestemos Patagonia, entre otros.

Su trabajo le valió ser nominada en 2011 por The Next Web como una de las ocho “gringas” que están en Latinoamérica a las que había que ponerle atención. Así explica su trabajo: “El emprendimiento tiene mucho de suerte, pero también es saber relacionarse con la gente. Porque puedes hacer todo el networking del mundo, pero si es para ti mismo, y no tienes la más mínima intención de dejarle algo a quien conozcas, va a ser tiempo perdido”, dice. ¿Cómo ve Loury el panorama actual en Chile? Prometedor. “Mucha gente dice que el emprendedor chileno es supercerrado y sólo piensa en proyectos que  funcionan acá, pero cambió radicalmente: por fin están perdiendo el miedo”.

Darcy Vergara: Cambiándole la cara al servicio

Cuando estudiaba Periodismo, Darcy Vergara (34) nunca pensó que en los datos que entregan quienes usan un sitio web estaría lo que la ha convertido en una de las profesionales de la experiencia de usuario más importantes de Sudamérica. “No hacemos un formulario de registro de tal manera sólo por tincada, porque me guste el verde o el rojo. Lo que me dicen los usuarios a través de las estadísticas es clave. Es complejo de entender, no sólo para un periodista; también para cualquier gerente”, cuenta.

Tras diseñar experiencias para banca online y retail en AyerViernes, se hizo cargo de mejorar las plataformas digitales de ChileCompra y ChileAtiende, y hace unos meses llegó a Chilexpress. Vergara siente, a días del último Cyber Monday, que a los servicios en Chile les falta transversalidad y que los consumidores, a diferencia de antes, nos damos cuenta: “Si tengo algún problema en el sitio web de un servicio, tengo que llamar por teléfono a un call center o ir a una sucursal, pero la persona que me atiende ahí me pide hacer otra vez lo que ya hice en internet”, asegura. Su objetivo es cambiar eso: “Quiero que puedas hacer un envío completo, de principio a fin, vía web. Que cuando la gente entre a mi sitio, diga: ‘Oye, ellos saben cómo hacerlo’. Nosotros ya sabemos; pero que el cliente lo perciba… ése es el desafío”.

David Assael y David Basulto: Mejores ciudades, aquí y en China

Siempre que se habla de ArchDaily, se hace como el blog de arquitectura más grande del mundo. La realidad es que ya no es sólo eso, hoy les entregan herramientas y conocimientos a los profesionales de esa área con la meta de mejorar la calidad de vida de los próximos 3 mil millones de personas que se mudarán a ciudades de aquí a 40 años. Tarea que no es menor: “Hoy, tenemos que adaptarnos a cualquier canal para llegar a los arquitectos alrededor del mundo”, cuenta Basulto. Para lograrlo, tienen un equipo de más de 50 personas que están trabajando -en su mayoría- desde Santiago, a pesar de las innumerables ofertas para partir a Silicon Valley. Aunque después de ganar el premio a la innovación Avonni 2013 en la categoría Servicios, la discusión es otra: “Nuestro jefe del equipo editorial en China nos tiene discutiendo sobre cómo escribir los nombres propios en mandarín”, cuenta Assael, sobre la versión que lanzarán antes de fin de año en ese mercado, donde hay sólo 30 mil arquitectos registrados para una población de casi 1.400 millones de personas.

Pero tampoco descuidan lo que pasa aquí, a través de Plataforma Urbana, que pasó de ser un blog a una ONG: “Si cambiamos la percepción de quienes viven en las ciudades para hacerlos más orgullosos y motivados de ellas, eso, como una agenda de mediano a largo plazo, estamos haciendo bien el trabajo”.

Marcos Chilet y Nicolás Rebolledo: Diseñando la democracia digital

Antes de colaborar con la candidatura de Michelle Bachelet diseñando su campaña digital, Marcos (30) y Nicolás (36) tenían claro el objetivo de DID, su estudio de diseño: generar cambios sociales a través de las plataformas digitales en un país que cambió. Y eso es lo que han tratado de plasmar en este proyecto, pero no es la primera vez para Chilet y Rebolledo: están detrás de la revista virtual SentidosComunes.cl desde 2011, y crearon para la Confech ReformaEducacional.cl, que articuló la difusión de los planteamientos de los estudiantes y llamó a la acción a quienes se manifestaron en las calles. Hoy se mueven en un escenario particular: la primera elección presidencial, donde la tecnología juega un rol clave y la participación en el espacio virtual no es garantía de depositar el voto en la urna. Hay más teoría que recetas de marketing político en la manera de abordarlo: “A diferencia de otros sistemas políticos, es muy difícil trazar en Chile si una persona que participó en la campaña digital fue a votar”, explica Rebolledo. Para Chilet, esto no es excusa para no innovar, porque hoy la democracia pasó de hechos simbólicos a los temas y cosas que marcan a cada ciudadano. “Las redes sociales en la política tienen un peso, que claramente es incremental. Pero nuestra investigación para entender la relación entre lo que se habla en el espacio digital y lo que se hace políticamente está recién partiendo”.

Uri Martinich: Lo haría y lo hizo

La historia de Uri Martinich (31) puede sonar conocida: estudió Ingeniería Comercial y desertó cuando su naciente empresa de sitios web para pymes comenzó a despegar. Cuando su socio lo defraudó y lo dejó sumido en deudas, recurrió a una idea que tenía en la cabeza: crear un sitio donde cualquiera pudiese vender servicios por poca plata. Así, partió a la salida de la estación de metro Baquedano a preguntarle a la gente qué harían por mil, dos mil, cinco mil o diez mil pesos; contactó a quienes ofrecían los servicios con potenciales clientes para ver cómo funcionaba… y resultó, como el caso de la chica que, por $5.000, se encargaba de la loza de una cocina, independiente de la suciedad o la cantidad de platos que la esperaran.

Loharía.com ganó AngelHack Santiago en 2012 y con casi 4.500 ofertas de usuarios bajo el brazo partieron a San Francisco, donde chocaron con una realidad para los emprendimientos latinos: los fondos internacionales de capital de riesgo no invierten en Latinoamérica simplemente por no estar en la región. Pero ganaron el desafío global Wayra -la incubadora de Telefónica- y son parte de la generación 2013 de Start-Up Chile. Junto a su socio Francisco Henseleit (28) lanzarán la nueva versión la primera semana de diciembre.

Radu Dutzan: La generación que viene

Autodidactas como Radu Dutzan (22) hay cada vez más. Ahora, autodidactas y autoexigentes, muy pocos. “La gente siempre habla de lo que hace una aplicación, pero hay dos caras: ésa y el goce estético. Que te emocione el hecho de usarla, que sea simple… eso pasa muy poco en Chile”, cuenta el creador de Cuánto Falta, la aplicación que creó la categoría de transporte en el mercado móvil nacional. “He logrado darme cuenta que el impacto va mucho más allá de decirte en cuánto va a llegar un bus al paradero: te calma la ansiedad en una ciudad que es frenética por naturaleza”, asegura.

Onda, su casa productora de aplicaciones para iOS, prepara el lanzamiento de una aplicación complementaria a su producto estrella: Hop Out, que permite recibir notificaciones en tiempo real para bajarse en el paradero correcto desde un bus en movimiento. Mientras, Radu trabaja en la interfaz web de Seahorse, la nueva startup de Oskar Hjertonsson y Daniel Undurraga (creadores de Clandescuento, adquirida por Groupon). “Estoy en eso ahora, trabajando en serio en una plataforma donde puedes crear todo desde cero, y partir con un lienzo en blanco, sin reglas. La web ha madurado, y yo también”.

Carlos Gaona: Todo es Medible

“¿Por qué Kodak desaparece ante Instagram? Porque las grandes estructuras se vieron enfrentadas a un cambio de paradigma, no supieron resolverlo y llegó alguien que habla el lenguaje mejor y sucumbieron. Eso mismo les va a pasar a la banca, al retail, a las empresas de telecomunicaciones”, afirma Carlos Gaona (31) después de casi cinco años en la alta dirección de agencias digitales, una reflexión similar al texto que escribe el personaje de Tom Cruise en Jerry Maguire, el filme de Cameron Crowe.

Su diagnóstico es que hoy la industria digital chilena subestima a los usuarios, que exigen mucho más en la vida real y online, pero se les ignora y bombardea con publicidad “al estilo de los años 50. Es como Mad Men: los mismos roles, pero 60 años después y con apellido digital”, argumenta. ¿Cuál es la clave entonces para llegar al usuario de hoy? Ésa es la misión de Medible, un estudio que ayuda a sus clientes a encontrarlos y hacerlos felices, que acaba de inaugurar. “A medida que el mercado madura, y muchas de las agencias quieren ser generalistas y hacerlo todo, desde una app hasta televisión, nosotros somos el nicho. Somos los especialistas”.   

 

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