Ni sus compañeros de Derecho en la Universidad Bolivariana ni los empaquetadores del supermercado en el que trabajaba para ayudar a costear sus estudios podían creerlo: Natividad Llanquileo (26), la silenciosa joven con quien apenas habían cruzado palabra por su timidez era la misma mujer de voz firme y actitud impetuosa que en julio pasado apareció en la prensa como vocera de los 34 presos mapuches imputados por terrorismo, quienes empezaban una huelga de hambre que duró más de 80 días.
ella fue quien negoció con la moneda. y desde allí afirman que, ante todo, es una mujer frontal y directa. "Natividad Llanquileo es una persona que tiene su carácter y defiende con fuerza sus puntos de vista, pero a la vez es receptiva y siempre escucha a su contraparte. Tiene una dosis de pragmatismo que permite avanzar en las negociaciones", dice el subsecretario General de la Presidencia (Segpres), Claudio Alvarado, quien fue una de las autoridades que, junto al ministro Cristián Larroulet y monseñor Ricardo Ezzati, debió conversar con Natividad.
"Natividad Llanquileo es una persona que tiene su carácter y defiende con fuerza sus puntos de vista, pero a la vez es receptiva y siempre escucha a su contraparte. Tiene una dosis de pragmatismo que permite avanzar en las negociaciones", dice el subsecretario Claudio Alvarado.
Cinco meses después de esas primeras negociaciones, Natividad se ha transformado en una figura clave en la defensa de los derechos de los mapuches dentro y fuera de Chile. No sólo tiene tres sitios de apoyo en Facebook, donde le escriben a diario; también ha sido invitada como panelista a seminarios en distintas universidades locales. acaba de llegar de su primer viaje a Europa, donde aterrizó para comentar la situación de los indígenas en Chile y los alcances de la ley antiterrorista: expuso en París, Bruselas, Ámsterdam, Berlín y Ginebra ante organismos de derechos humanos y también en la ONU, la OIT y la Organización Mundial contra la Tortura. Fue invitada por el Departamento de Pueblos Indígenas del Consejo Mundial de Iglesias. "Allá me encontré con gente que estaba muy interesada en el tema, entre ellos varios parlamentarios alemanes", dice.
Natividad creció en Tirúa. allí conoció a Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM) y amigo de su hermano ramón llanquileo, quienes le solicitaron que oficiara de vocera de los presos mapuches. Natividad no lo pensó dos veces y de inmediato abandonó el último semestre que le quedaba para terminar Derecho. Viajó a Concepción para acompañar a los detenidos en la cárcel El Manzano, entre ellos el propio Llaitul y su hermano Ramón, ambos imputados por el atentado al fiscal Mario Elgueta, en Puerto Choque, en octubre de 2008. Desde entonces, natividad no ha dejado de hablar en voz alta.