Por Damián Glanz* Diciembre 17, 2010

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Es devoto del perfil bajo. El rol que ocupa en la familia presidencial es un misterio. Máximo, el hijo mayor de Cristina Fernández, forma parte del proceso de canonización de Néstor Kirchner. El ex mandatario fue elevado en pocas horas a santo tras su repentina desaparición. Y este joven de 33 años acompaña el mito y representa el sueño del "kirchnerismo eterno". En el entorno más ultra del gobierno hay funcionarios que se atreven a postularlo como heredero político de su padre, aunque él nunca haya ocupado un cargo ni participado en una contienda electoral o manifestado en público su voluntad de ejercer el poder.

Las especulaciones en torno al futuro de Máximo surgieron el mismo día de la muerte de Kirchner, el 27 de octubre. Parado junto a su madre en la capilla ardiente, inspiró la imagen del "nuevo hombre de la casa", del "confidente presidencial". Y su inevitable presencia en la quinta de Olivos en los días posteriores alimentó la leyenda.

Máximo divide sus días entre Buenos Aires y Río Gallegos, el terruño del clan. En el sur está dedicado a la administración de los bienes familiares, una fortuna invertida en hoteles, casas y tierras. El joven Kirchner encontró su lugar en el mundo luego de recorrer otras latitudes: se interesó en el periodismo deportivo y en el derecho, pero esos intentos académicos no prosperaron.

Cada vez que se acerca una elección, surge la posible candidatura de Máximo a la intendencia de Río Gallegos. Pero los anuncios nunca se concretan. Ahora, con el prematuro lanzamiento de la carrera electoral de 2011, el slogan "Máximo Kirchner intendente" ya circula entre los militantes de La Cámpora, organización política juvenil que él contribuyó a fundar. Porque forma parte de la leyenda, el apellido Kirchner pesará el año próximo como nunca antes a la hora de los votos. Por eso, el futuro político de Máximo es algo más que incierto. Es probable. En cambio, el destino de su madre es más que probable. Es necesario. El oficialismo sabe que sin Cristina como candidata, el kirchnerismo está condenado a la extinción.

*Periodista argentino.

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